En esta ocasión, vamos a abordar las enfermedades cardíacas comunes en niños, sus causas y cómo prevenirles. Los problemas cardíacos en niños pueden incluir anomalías estructurales, problemas con el sistema eléctrico que controla los latidos del corazón, y factores de riesgo relacionados con la obesidad y la diabetes
Los problemas cardíacos más comunes en niños incluyen:
- Cardiopatías congénitas: Se producen cuando el paciente nace con una patología cardiaca, ya sea porque se detecta intraútero o porque los médicos descubren una anomalía en el parto.
- Defectos musculares: Son anomalías del músculo cardíaco que no suelen tener repercusión en la vida cotidiana del niño.
- Defectos de las válvulas: Se refieren a problemas en las válvulas del corazón que pueden requerir operación.
- Anomalías complejas: Incluyen malformaciones del músculo cardíaco en forma de agujeros o válvulas que no funcionan bien.
- Insuficiencia cardíaca: Es un trastorno en el que el corazón no bombea sangre adecuadamente, lo que puede llevar a la acumulación de líquido en el cuerpo y a la falta de oxígeno en determinadas áreas.
Causas:
- Anomalías estructurales: Algunas enfermedades del corazón pueden ser anomalías estructurales con las que los niños nacen4.
- Sistema eléctrico: Otras enfermedades pueden tener que ver con el sistema eléctrico que controla los latidos del corazón4.
- Factores de riesgo: La obesidad y la diabetes son factores de riesgo que contribuyen a las enfermedades cardíacas en niños y adolescentes6.
Prevención:
- Hábitos saludables: Los niños pueden reducir sus probabilidades de tener problemas cardíacos al desarrollar hábitos saludables como no fumar, mantener una dieta saludable, hacer ejercicio y mantener un peso saludable1.
- Control de factores de riesgo: Controlar la diabetes, la presión arterial alta y otras afecciones que contribuyen a las enfermedades cardíacas es importante para prevenirles6.
- Educación y conciencia: La educación y la conciencia sobre la importancia de mantener un estilo de vida saludable desde la infancia pueden contribuir a reducir el riesgo de enfermedades cardíacas3.
En resumen, los niños pueden desarrollar hábitos saludables y controlar factores de riesgo como la obesidad y la diabetes para reducir el riesgo de enfermedades cardíacas. Además, la educación y la conciencia sobre la importancia de mantener un estilo de vida saludable desde la infancia pueden contribuir a reducir el riesgo de enfermedades cardíacas en niños y adolescentes.