Hoy en día, el dolor de rodilla se está convirtiendo en el problema más común entre la población. Es un espectáculo popular con gente de todas las edades y puede comenzar repentinamente, a menudo es después de una lesión o un ejercicio mal ejecutado. El dolor de rodilla también puede comenzar como una molestia y es vital no hacer caso omiso a estos ya que las lesiones podrían empeorar.

La fisioterapia y el uso de rodilleras es una consideración importante para muchos tipos de lesiones y puede realizarse como medida preventiva o como parte de un plan de tratamiento. El objetivo de cualquier tipo de rodillera es trabajar en conjunto con las estructuras innatas de la rodilla para reducir el dolor y promover la estabilidad sin sacrificar la función normal de la rodilla, disminuyendo así el riesgo de lesiones.

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Te invitamos a seguir algunas recomendaciones para usar una rodillera de forma adecuada

1 – Escoge el estilo de rodillera correcto. El tipo de rodillera que uses depende de la gravedad de tu lesión. Si solo tienes un esguince leve, puedes usar una prenda de compresión simple.

Para fracturas o lesiones graves, es posible que necesites un aparato ortopédico con bisagras de plástico o metal. Un médico ortopedista puede recomendarte la mejor rodillera para tu lesión.

También es importante encontrar una rodillera que sea del tamaño adecuado para ti.
Las dimensiones generalmente se indican en la parte posterior del empaque, los modelos comerciales pueden tener tamaños estándar.

 

2 – Jala la rodillera sobre la pierna. Comienza envolviendo la pernera (parte alta del pantalón que cubre los muslos de las piernas) de tus pantalones para que no se mueva. Mueve tu pie sobre la parte superior del aparato ortopédico (el área que se ensancha para adaptarse a tus muslos) y hacia afuera. Desliza la rodillera sobre tu pierna hasta que descanse sobre la rodilla afectada.

Si la rodillera que estás usando es una envoltura en lugar de un abrazo para la pierna, coloca el interior de la almohadilla sobre la rodilla y envuélvela con las correas.

  1. Centra la rodillera en la rótula. La mayoría de las rodilleras tienen una pequeña abertura en la parte delantera para indicar en qué dirección deben colocarse. Cuando se usa correctamente, la punta de la rótula debe verse a través de esta abertura. Esto proporcionará más comodidad y mantendrá abierta la piel debajo de la rodillera
  • Alinea la rodillera para que el orificio no pellizque ni agarre la piel.
  • Asegúrate de que la rodillera no se deslice hacia arriba o hacia abajo antes de asegurarla.
  1. Ajusta las correas. En cuanto a la pernera del pantalón, has terminado de colocar correctamente la rodillera. Si hay correas adicionales disponibles, envuélvelas alrededor de la parte posterior del aparato ortopédico y asegúralas al frente con correas de velcro. El aparato ortopédico debe quedar ajustado, pero no demasiado apretado.
  • Asegúrate de poder insertar uno o dos dedos entre la rodillera y la pierna. Si no puedes, probablemente deberías aflojarlo un poco.
  • Instalar la correa inferior primero estabilizará el soporte y te ayudará a obtener un ajuste más estable.

Ahora bien, ya te explicamos como utilizar correctamente tu rodillera ortopédica, sin embargo, te dejamos algunas recomendaciones adicionales para que el tiempo que uses tu rodillera sea lo más cómodo posible y que tu lesión mejore.

  1. Usa pantalones cortos. A la mayoría de las personas les resulta más fácil ponerse y quitarse el aparato ortopédico si no hay material adicional disponible para bloquearlo. Los pantalones cortos te darán acceso instantáneo a la pierna afectada mientras promueven el flujo de aire para que no te acalores ni te asfixies.

Estos pantalones cortos son ideales para acomodar tipos más largos de rodilleras (como las rodilleras funcionales articuladas) que se colocan por encima de la pierna.

  1. Coloca la rodillera debajo de otras prendas de vestir. Cuando hace frío afuera o en un lugar con un estricto código de vestimenta, como la escuela o el trabajo, es posible que debas cubrirte las rodillas. Elije ropa holgada, como jeans o pantalones deportivos, ya que la rodillera puede caber fácilmente debajo. Esto también evitará que los bordes sean demasiado claros.
  • Siempre ata la rodillera primero, y luego ponte la ropa. Funcionará mejor cuanto más cerca esté de la extremidad.
  • La ropa de estilo deportivo tiende a ser holgada y brinda un poco de flexibilidad, lo cual puede ser más fácil de manejar que los pantalones ajustados.

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  1. Retira la rodillera periódicamente. Esto aliviará la presión alrededor de la rodilla y le dará a la piel la oportunidad de respirar. Ten cuidado de no aplicar demasiada presión en la pierna afectada cuando no estés usando el aparato ortopédico. Puede ser mejor sentarse o acostarse.
  • La rodillera debe quitarse antes de ducharse o nadar para evitar mojarse.
  • Asegúrate de hablar con tu médico para ver si está bien estar sin apoyo y por cuánto tiempo.

En conclusión, todas las rodilleras deben comenzar consultando con tu médico. Aunque no es necesario una receta médica para adquirirlas, es recomendable usarse después de un diagnóstico preciso y de que se haya implementado un programa integral de rehabilitación.

Aunque algunas rodilleras protegen la rodilla de más lesiones, la rehabilitación que se enfoca en la flexibilidad, la fuerza, el rango de movimiento y el equilibrio debe ser la base de cualquier programa de rehabilitación.

Creado por:

Miguel Montes

Un comentario en “Como Usar una Rodillera Ortopédica

  1. Rosa parra dice:

    Traigo rodillera mecanica para dormir la puedo retirar ?
    Gracias de antemano

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