Animales que mejoran la vida de personas con discapacidad
Hablamos de la zooterapia o Terapia Asistida con Animales (TAA), como una alternativa terapéutica, proporciona beneficios palpables sobre las personas con discapacidad intelectual.
Una auténtica relación afectiva es lo que percibe la persona en el ejercicio de estas terapias. Un estímulo cuyos beneficios se traducen en la potenciación de la comunicación verbal y no verbal, de la relación social, de los movimientos voluntarios, del placer del tacto a través de las caricias… en definitiva la TAA genera un aumento de la actividad, de la sensibilidad y de la relajación en personas que requieren apoyo especial.
Personas con trastorno del espectro autista, con síndrome de Down o con discapacidad intelectual de otro tipo son susceptibles de mejorar su calidad de vida y su integración social a través de la zooterapia. Junto a ellos, los monitores y terapeutas cumplen un papel imprescindible como “facilitadores” entre los animales y las personas; además, los terapeutas son testigos directos del efecto más inmediato que suele producir la TAA: una enorme sonrisa.
Es necesario tener en cuenta la importancia que posee que el paciente pueda interactuar con el animal de manera segura, el ejercicio terapéutico debe enfocarse en el establecimiento de relaciones afectivas y de la vida de relación.
Otro de los beneficios es que permite la formación de una autonomía en aquellas personas que posean una discapacidad a nivel neuromuscular o cerebral haciendo uso por ejemplo de un perro, el cual se convierte en una especie de amigo asistente para el individuo, ayudándole a realizar pequeñas tareas como abrir una puerta.
¿Qué especies animales son las más adecuadas en zooterapia?
Terapia asistida por caninos: los perros de terapia, a través del contacto corporal, transmiten consuelo y acompañamiento. Se distinguen por un comportamiento que las personas asistidas interpretan como amigable y acogedor. Obviamente, se requiere que estos canes posean un temperamento tranquilo. Algunas razas, como el Labrador y el Golden Retriever, son más propicias para este cometido.
Equinoterapia: el caballo es un excelente soporte terapéutico para ciertos trastornos físicos, intelectuales y psíquicos. El movimiento equino transmite impulsos rítmicos sobre la columna, la pelvis y las piernas del jinete, y esto repercute en su bienestar físico. Además, el caballo adiestrado para equinoterapia es un animal dócil que disfruta del contacto humano, y esto lo percibe perfectamente el jinete, influyendo así en su autoestima y su estabilidad emocional.
Otras especies, como delfines, aves, conejos, etc. son también empleados en estas terapias y su efecto sobre las personas con discapacidad intelectual es indudable.
Con estas terapias de acercamiento a los animales se consigue crear una sensación de aceptación incondicional por partes mutuas (también los animales). El fin es vivir un momento constructivo y que los participantes aprovechen la terapia y pasen un buen rato.
Caso de éxito
El Zoológico Nacional en Cuba es una institución científico-educativa, entre sus funciones destacan la exhibición de animales exóticos y nativos con fines educativos y recreativos, la conservación y reproducción de estas especies (sobre todo las que se encuentran en peligro de extinción), y últimamente, han ofrecido una nueva forma de terapia asistida por animales.
La división encargada de este proyecto se llama Zooterapia y en ella, escuelas de niños con discapacidad aledañas, así como personas con distintas discapacidades acuden a convivir con jaguares, serpientes y otros reptiles, con resultados positivos y al mismo tiempo ayuda a entender la importancia de la conservación de especies.
Es tiempo de reivindicar el rol, cada vez más importante, de los animales que brindan soporte emocional a todo tipo de personas. Muchos de nuestros mayores, por ejemplo, viven su soledad acompañados de algún animal doméstico, haciendo de su vida cotidiana una experiencia más plena y humanizada.
Creado por:
Jesús Isaac