Hormigueos, calambres musculares, varices, edemas o dilataciones, pies fríos en invierno e hinchados en verano, los problemas decirculación en la sangre son cada vez más frecuentes y nos pueden traer serios problemas a la salud como dañar órganos vitales o enfermedades vasculares como las varices. Sin embargo ¿Sabías qué existen alimentos que puedes consumir para prevenir este tipo de problemas o contrarrestarlos?

Algunos alimentos como la naranja, la pimienta cayena, el jengibre o el ajo poseen propiedades antioxidantes y antiinflamatorias que mejoran la circulación sanguínea, permitiendo aliviar los síntomas que suelen estar asociados a una mala circulación, como la retención de líquidos, el dolor y el cansancio en las piernas, por ejemplo.

Por este motivo, se deben incluir estos alimentos en la alimentación diaria, así como evitar aquellos que promueven una mala circulación, como son los alimentos ricos en grasas y azúcares. Además de esto, es importante el consumo de agua a lo largo del día, ya que esto favorecerá la circulación sanguínea y disminuirá la hinchazón en el cuerpo. Este tipo de alimentos debe ser el centro de tu dieta para, de esta manera, ayudar a aumentar la circulación y prevenir problemas de corazón. Reduce el consumo de alimentos ricos en grasas trans, o grasas saturadas, sustituyéndolos por elementos

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En este artículo te vamos a presentar los 14 alimentos más recomendados por profesionales de la salud que nos puede ayudar a contrarrestar algunos de los malestares más comunes relacionados con nuestro flujo sanguíneo.

1. El limón mejora la elasticidad

La vitamina C del limón es imprescindible, pues interviene en la formación de colágeno y elastina, unas proteínas que influyen en la pared capilar.

El alto contenido de vitamina C que encontramos en el limón dificulta la acumulación de grasa en la sangre, reduce la retención de líquidos y favorece de este modo la circulación sanguínea. Además, es perfecto para ayudarnos a depurar toxinas.

2. La cúrcuma protege frente a la inflamación

La cúrcuma es antiinflamatoria y fácil de usar. Buena parte de sus beneficios para la circulación se deben a su efecto antioxidante, que contrarresta la acción de radicales libres y tóxicos en el organismo.

Sus propiedades antiinflamatorias y antioxidantes hacen de la cúrcuma un aliado perfecto para mejorar la circulación de la sangre. Además, la cúrcuma ayuda a estimular la función del hígado y a reducir el nivel de azúcar en sangre.

3. El jengibre fluidifica la sangre

El jengibre tiene propiedades analgésicas y antiinflamatorias que repercuten positivamente en la circulación sanguínea. También mejora la elasticidad de las arterias y las venas.

El consumo frecuente y habitual de jengibre ayuda a movilizar la energía y activa la circulación de la sangre al fluidificarla. Consúmelo fresco o seco a diario en salsas, cremas de verduras, dulces o infusiones.

4. Las semillas de girasol aportan vitamina E

Además de aportar aminoácidos esenciales necesarios para el mantenimiento de las estructuras capilares, son ricas en vitamina E, uno de los antioxidantes más potentes para nuestro cuerpo.

5. El ajo tiene efecto anticoagulante

El ajo es un anticoagulante natural que ayuda a que la sangre circule mejor en los vasos. Junto con la cebolla, estimula la circulación sanguínea y disminuye la viscosidad de la sangre.

6. La cola de caballo mejora el estado de los vasos

Es rica en silicio, necesario para la formación de colágeno y, por tanto, el mantenimiento de las paredes vasculares.

7. El trigo sarraceno refuerza la acción de la vitamina C

Este pseudo cereal es rico en un flavonoide llamado rutina que actúa en sinergia con la vitamina C protegiendo la pared de los vasos y capilares. Su consumo habitual contribuye así a la protección de los vasos sanguíneos.

8. Las bayas oscuras mejoran el tono venoso

Bayas como la uva negra o los arándanos son muy ricas en antioxidantes y, en sinergia con la vitamina C, también ayudan a mejorar el tono venoso.

9. El mijo tonifica el bazo

El mijo es el cereal por excelencia para tonificar el bazo, según la Medicina Tradicional China. El bazo rige los vasos sanguíneos y permite que la sangre permanezca en ellos y circule correctamente.

10. Las nueces son vasodilatadoras

Además de omega-3, unos ácidos grasos necesarios por su efecto antiinflamatorio, las nueces aportan vitamina B3, que por su efecto vasodilatador favorece la circulación y el retorno venoso.

11. La naranja reduce el colesterol malo

Famosa por su alto contenido de vitamina C, además de ayudar al sistema inmunológico fortalece las paredes capilares y evita la acumulación de placas de sangre. Por si fuera poco contiene unas sustancias denominada flavones polimetoxilatados que reducen el colesterol malo en la sangre.

12. Los tomates ricos en antioxidantes

Contienen Licopeno, un antioxidante que estimula la circulación sanguínea y previene problemas cardiacos. Otros alimentos que contienen esta sustancia son la sandía y el melón. Por si fuera poco los jitomates previene enfermedades vasculares como la arteriosclerosis e impiden la formación de grasa en la sangre.

13. El chile un buen analgésico

El chile es rico en capsaicina, que tiene propiedades analgésicas y antiinflamatorias siendo benéfica para el corazón y el sistema circulatorio, además ayuda a reducir los niveles de colesterol.

El chile ayuda a fortalecer las arterias, los vasos sanguíneos y a mejorar la circulación de la sangre por nuestro cuerpo. Aunque suene chocante, su efecto picante es un buen propulsor de la circulación.

14. El agua nunca debe faltar

Por último y no menos importante, el agua ayuda a eliminar toxinas  del cuerpo, lo que sin duda ayuda a mejorar la circulación sanguínea, además previene los coágulos de sangre. Se recomienda consumir de 1 Lt ½ a 2 Lt al día para mantener el cuerpo hidratado y poder transportar los nutrientes necesarios a todos los órganos y tejidos.

Lo más importante es reiterar que los problemas circulatorios necesitan siempre atención y tratamiento médico. No hay nada que sustituya esto, ahora bien, la dieta y el ejercicio son unos aliados fundamentales para combatir y mejorar dichos problemas. Una vida sana, con hábitos saludables ayudan a prevenir los problemas de circulación.